El taller del escultor Rodrigo Espada lo visitamos el pasado martes 19 de noviembre con nuestros alumnos del bachillerato de Arte. Comenzamos la visita entrando en una gran nave que tiene por taller en el centro de la ciudad y nos fue entregando uno a uno un folio lleno con códigos QR de cada una de sus obras.
Rodrigo trabaja la escultura por encargo, por eso en su taller lo que pudimos contemplar era el proceso de realización de todas sus obras: moldes de escayola, de resina, de silicona, pruebas y más pruebas en infinidad de materiales. De esta manera, con solo acercar el móvil a una de esas piezas inacabadas veíamos la escultura terminada y ubicada en tiempo real. Una gran aplicación que acerca al alumnado a este tipo de visitas, haciendo que sea mucho más cercana y accesible.
Resultó de gran interés para todos los alumnos, ya que estaban muy entretenidos intentando localizar esos relojes que coloca el artista en sus obras a modo de guiño para el espectador.